viernes, 10 de julio de 2009

La pintura en el siglo XX: La Abstracción


Salido del movimiento expresionista, Kandinsky es considerado como el pintor que produjo la primera obra abstracta. Los otros artistas abstractos, ¿han recibido la influencia de los descubrimientos de Kandinsky o, por el contrario, han desarrollado un arte independientemente?

Con algunos cubistas aparece la intención expresa de no representar y de librarse completamente del objeto y de la Naturaleza. Durante este período ocurrió que artistas tan diferenciados como Delauny o Kupka sintieron la necesidad de producir una pintura directa, en la que no hubiera ninguna relación con las cosas que vemos y tal como las vemos. Todo eso puede ser fruto de la reflexión, del azar o de una inspiración. Kandinsky explicó a menudo que al entrar un día en su estudio se vio sorprendido por los cuadros que estaba pintando entonces. Se dio cuenta de que un cuadro había sido colocado al revés. Mirando y analizando concienzudamente la emoción que había tenido a primera vista, descubrió que había pintado así, que no existía derecho ni revés, ni arriba ni abajo, y que la pintura está hecha simplemente de formas. Este fue el comienzo de su pintura, por la cual se ha convertido en uno de los más grandes creadores del arte moderno.

El arte abstracto se ha desarrollado en todos los sentidos, en todas las direcciones. Se puede decir que, aquí, todavía es posible encontrar esa cierta oposición que hemos visto establecida entre Van Gogh y Cézanne. Es decir, existen dos direcciones posibles en el arte de pintar: una conducida por el intelecto y la voluntad, y la otra conducida por el instinto y la espontaneidad. Esta división nos aparece también dentro del mismo arte abstracto intuitivo. El abstracto intuitivo, como el del gran americano Pollock, el cual pintó únicamente por instinto, deja producirse la pintura en el límite de su gesto. Al contrario, una pintura abstracta muy pensada y matemática pide algo más del mundo, pide relaciones de línea y color. Tal es el caso de Josef Albers que ha concebido un sistema de pintura abstracta, geométrica, muy rigurosa.



Entrevista de María José Ragué a Jean Cassou

jueves, 9 de julio de 2009

La pintura en el siglo XX: El Expresionismo


Paralelamente al cubismo, los paises germánicos desarrollaron el expresionismo. ¿Cuál es la relación entre los movimientos franceses y el expresionismo alemán?

Se puede detectar el expresionismo, junto a cierto número de movimientos, fuera de Francia. Particularmente en Alemania, donde los pintores hen creado el término exacto de "expresionismo", y este término, al igual que el de "impresionismo", indica muy bien lo que quiere decir. El expresionismo también define una nueva ambición: la pintura ya no es representación, no es una idea, sino una expresión. Pero, ¿expresión de qué? Sin duda de los estados del alma, los temperamentos, los instintos, las voluntades, manifestados directamente con imágenes, formas perfiles y colores; la vida interior del artista, sus instintos, sus pasiones; también el mundo movido por una especie de fuerza amorosa, la Naturaleza animada de savia, eso es lo que había que expresar. Tenía que expresarse con el esfuerzo cultural, había que sacar algo de la Naturaleza para expresarse. Y suele decirse que con tales posibilidades los pintores que se reunieron en Alemania expresaron todo su arte. Existieron diversos movimientos, varias sociedades de artistas fracasaron, pero se puede decir que Berlín desempeñó un gran papel. Estos pintores germánicos reconocieron a su maestro en el noruego Munch, quien realizó, con gran éxito, una exposición en Alemania; se reconocieron también en Toulouse-Lautrec, y se sintieron atraídos por las "revoluciones" que tenían lugar entonces en París. Invitaban a pintores de vanguardia parisienses para que pudiesen figurar en sus exposiciones. Este mivimiento se desarrolló con mucho vigor. Algunos grupos de pintores siguieron otros derroteros y, encaminados hacia la construcción y la abstracción geométrica, fundaron una escuela de arquitectura, la Bauhaus, que desapareció a la llegada de Hitler. El expresionismo no se manifestó tan sólo en Alemania, sino que existió también un expresionismo belga. Fue una especie de renacimiento de la pintura belga, parecida a la alemana. El término "expresionismo" se transformó en un término genérico, como el de "romanticismo" por ejemplo, y se puede afirmar que existe un expresionismo en el arte moderno. A los franceses no les gusta mucho emplear el término expresionismo, pero se puede decir que algunos pintores tienen un temperamento correspondiente al de los expresionistas alemanes. En este sentido, se puede afirmar que Chagall es un expresionista.

miércoles, 1 de julio de 2009

La pintura en el siglo XX: El Cubismo III


¿Se puede considerar con certeza las Demiselles d'Avignon como el primer cuadro cubista?

Esta obra de Picasso, pintada en 1907, no puede ser considerada como cubista, ya que no posee esa geometría. No aparecen las formas como aparecerán en el cubismo, y tampoco hay objetos dentro. Uno de los grandes favoritos del cubismo ha sido el objeto, los objetos familiares. Con tales objetos, los pintores cubistas obtenían cierta variación. Pero no hay tan sólo objetos, no hay tan sólo juegos geométricos en las Demoiselles d'Avignon, cuya pintura es muy sobria, una pintura de la que se puede decir que no es verdaderamente cubista. Es una pintura muy extraña, de gran violencia, de una libertad absoluta. En ciertos sitios de esta pintura aparece ya un "recortado". Algunas formas de expresión del cubismo aparecen ya en esta obra. Pero su interpretación puede escaparnos.

La pintura en el siglo XX: El Cubismo II


¿Cuáles han sido los papeles respectivos de Braque y de Picasso en el cubismo? ¿Cuál de ellos fue el primero en iniciar el cubismo? Junto a los nombres de Braque y de Picasso, ¿cuál es la importancia de otros artístas, como Juan Gris, Marcoussis, etc.?

No se puede decir quién fue el iniciador del cubismo. Es cierto que el encuentro de Picasso y Braque, dos grandes famosos, fue un acontecimiento muy importante. Pero, sin embargo, un hombre, Delaunay, buscaba su arte en la misma dirección que aquéllos, pero al mismo tiempo buscaba otra cosa. Mientras Picasso y Braque escogían una manera de pintar monocorde, únicamente en pardos, negros y blancos, Delaunay, por el contrario, estaba muy preocupado por el color y había seguido estudiando los contrastes simultáneos, igual que el uso de tonos complementarios, intentos desarrollados ya por eminentes especialistas. Tuvo también la idea de una pintura que sólo representara lo que calificaba de "informal", y así, del cubismo pasó a la abstracción. Fue uno de los precursores del arte abstracto, a pesar de haber sido también un cubista. También hay que citar a Frantisek Kupka, uno de los jefes de la Section d'Or y uno de los primeros artistas checos que se estableció en París (1894). Este pintor desarrolló una especie de cubismo, y enseguida se sintió atraído por otras aspiraciones, las de crear formas completamente libres de la realidad, viviendo únicamente por sí mismas, formas geométricas, formas jugando como formas musicales. Por otra parte, los títulos de sus primeras pinturas representaban nombres de melodías (Fuga, Melodía, etc.) Tenía intención de hacer desempeñar a la pintura otro papel que el que le había sido asignado siempre. Acercó su lenguaje al lenguaje no significativo de la música. Entonces tuvo lugar un hervor extraordinario, un hervor de ideas, de investigaciones, verdaderamenmte asombroso.

Un hombre, Chagall, disfrutaba pintando imágenes y rostros muy poéticos, muy singulares y de mucha fantasía. Se puede decir que con esto creaba el surrealismo, y demostraba que elementos de pura imaginación, de pura poesía, podían aparecer como anunciando esa poética singular que sería más adelante el surrealismo. Se produjeron toda clase de movimientos extraños. Había el cubismo claro, lo que se ha llamado "el cubismo ortodoxo", ya que había sido presentado primero con cierto rigor; y luego lo que se ha llamado el "cubismo herético", que ha sido un compañero del cubismo. Entonces, al contrario, pintores como Juan Gris y Marcoussis podían ser considerados cubistas con una orientación muy personal, y una poesía igualmente personal.

La pintura en el siglo XX: El Cubismo I


¿En qué consiste la "revolución" del cubismo?


El cubismo es un movimiento completamente intelectualista, totalmente apartado de la Naturaleza; pinta las cosas no como las vemos, sino tal como las conocemos; las cosas sabidas igual que las deseadas. Es decir, sabe muy bien que el objeto que vemos no es tan sólo la cara que presenta; de ahí que represente también unos contornos posteriores y superiores. No existe razón para no mostrar el objeto en su totalidad y limitarse a un aspecto parcial del mismo. El cubismo ha elaborado una geometría muy complicada, lo cual hace extraordinariamente difícil la "lectura" de la pintura cubista. Se ve el fragmento de un objeto, pero no se ve en su conjunto. Se ven combinarse todos esos fragmentos, los planos, los perfiles. En pocas palabras, tal como se suele decir, "entonces se rompe el jarrón" y con esos fragmentos suelen hacer cosas llamadas pinturas. La pintura no es una reproducción o imitación, sino que sigue siendo ella misma un objeto. De ese modo, con una especulación de este tipo, regida por la abstracción, por la imaginación y por la inteligencia, se puede decir que ha sido creada esa escuela tan singular, el cubismo, que no tiene ninguna relación con las otras maneras de pintar. Los creadores de esta revolución han procedido por tanteo. Todo es experimental, intuituivo y, a la vez, un juego, lo cual le da su nobleza: haber sido un juego de la inteligencia y del buen gusto hecho por hombres dotados de un gran poder intelectual, por ejemplo, hombres como Picasso y Braque. Después llegó la teoría. Algunos de estos pintores aprendieron la teoría de lo que hacían. También fueron ayudados en sus tareas por poetas amigos suyos: Apollinaire, Reverdy, Salmon y Max Jacob. Y todo eso ocurrió en un momento bastante singular de la vida parisiense. Ocurrió en barrios de cierto carácter, como Montmartre y Montparnasse. En Montmartre, una serie de casualidades hizo que en un estudio miserable de la calle Ravignon, llamado Bateau Lavoir, se encontraran nombres como Picasso, Max Jacob y Juan Gris. En Montparnasse, los encuentros tuvieron lugar en estudios, pero paticularmente en cafés (legendarios desde entonces) como Le Sélect, Le Dôme, La Rotonde. Tuvieron lugar también en grupos de estudios, y aquí, con cierta mezcla de poetas y casualidades, se encontraron toda clase de artistas llegados desde lugares muy diversos. Algunos, muy importantes, franceses, como Braque, Léger, a los cules se unió toda una ola de artistas llegados del extranjero, entre ellos judíos expulsados de los países del Este, que llegaban de los guettos de Rusia y Polonia, y otros que no tenían las mismas razones para expatriarse, pero se sentían atraídos por la gloria de París -por ejemplo, españoles e italianos-. En fin, de todos los países del mundo llegaron pintores que no encontraban en su país las condiciones para poder expresar su arte como deseaban. No diré que no hubieran condiciones de vida artística en España o en Italia; al contrario, son países gloriosos en el campo del arte, pero París ejercía entonces un atractivo extraodinario para todos los artistas extranjeros que sentían una vocación, que querían inventar en el dominio de las formas y pensaban que sólo lo podían hacer en París. Francia había acogido ya a Van Gogh. Desde entonces se ha producido una especie de internacionalismo, que se formó en París. Todo esto convirtió a la pintura francesa en la pintura de nuestro siglo.